Visite los jardines de la Torre Eiffel

Las obras de acondicionamiento de los jardines que rodean la Torre Eiffel (por una parte, a lo largo de los pilares oeste y sur y, por la otra, a lo largo de los pilares norte y oeste) iniciadas en marzo de 2018 han finalizado, de forma paralela a la instalación del nuevo perímetro que delimita el emplazamiento de la Torre Eiffel. También desde marzo los visitantes utilizan las entradas (dedicadas a los controles de seguridad) situadas en las Allées Refuznik y Paulhan y atraviesan los jardines para acceder al atrio.

Por supuesto, el acceso a los jardines y al atrio de la Torre Eiffel sigue siendo gratuito para todos los viandantes, tanto parisinos como turistas.

Declarados «espacios ajardinados protegidos» (EBC), la historia de estos jardines es más antigua que la de la propia Torre puesto que ya existían antes de que esta fuera construida. En 1889, ya podíamos pasear por estos espacios verdes con sus dos masas de agua, construidos por los servicios de la Villa de París para las Exposiciones Universales anteriores.

Recuperar las perspectivas históricas

Los visitantes, que lleguen por la entrada sur o la entrada este, pueden entretenerse paseando por los nuevos senderos y redescubrir los jardines, reinventados atendiendo a su continuidad histórica. Durante su recorrido por los jardines o mientras descansan en un banco, los visitantes quedarán sorprendidos cuando al levantar la vista, descubran perspectivas de la estructura de la Torre que habían caído en el olvido desde principios del siglo XX. Estas perspectivas, denominadas conos ópticos, habían quedado bloqueadas por la abundante vegetación.

Al recorrer las 2 000 hectáreas de espacios verdes, brindamos a los visitantes la oportunidad de redescubrir todo el arte de los jardines del periodo que va desde finales del siglo XIX a los años 1930. Se han replantado alrededor de 2 000 arbustos y 20 000 plantas vivaces (helechos, muguete, hortensias…); se han renovado los miradores típicos de los jardines parisinos de la Belle Epoque y extensas superficies de verde césped enmarcan los también renovados estanques ¡para deleite de los patos que los habitan ! 

La chimenea, testigo de la historia de la Torre

Y, en la histórica colina que acoge una gruta y una pequeña cascada rocosa cerca de la salida oeste, los visitantes podrán contemplar de cerca uno de los vestigios históricos de la construcción de la Torre: la chimenea, que servía para evacuar los humos de las maquinarías que suministraban la energía necesaria a los ascensores empleados en la primera fase de explotación de la Torre Eiffel. No muy lejos de ella, encontramos uno de los árboles notables de Francia: un plátano de sombra bicentenario (plantado en 1814) de 20 metros de altura, que despide con elegancia a los paseantes que abandonan el lugar por la salida oeste. 

Disfrute plenamente de este nuevo recorrido de visita de libre acceso y de las inéditas perspectivas del monumento, desde el suelo o las alturas. Vistos desde lo alto, desde la plancha de vidrio de la 1ª planta o desde las escaleras durante el descenso, estos jardines lucen en todo su esplendor.

*Proyecto de remodelación de los jardines elaborado conjuntamente por VOGT landscape LTD y Dietmar Feichtinger Architectes.

** La distinción Árbol notable de Francia «Arbre remarquable de France» es una certificación nacional, concedida por la asociación A.R.B.R.E.S. La Villa de París se encarga de la gestión del patrimonio arbolado, también en el interior del recinto de la Torre Eiffel.