La historia de Gustave Eiffel y su fonógrafo

Seguro que su cara le suena, ¿pero había escuchado alguna vez la voz de Gustave Eiffel? Gracias a las grabaciones fonográficas archivadas por la BNF (Biblioteca Nacional de Francia), su voz ha sobrevivido al paso del tiempo, algo distorsionada, un poco aguda y temblorosa, pero con la capacidad de inmortalizar al creador de la Torre Eiffel.

Escúchela en la página web del INA gracias a un emocionante archivo radiofónico de 1948, que además es la grabación radiofónica más antigua de la institución.  Los documentos de audio difundidos en este archivo se remontan a 1891. Gustave Eiffel se divierte grabando algunas palabras con su fonógrafo, un aparato innovador que Thomas Edison le había regalado dos años antes.

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Thomas Edison y Gustave Eiffel, encuentro en la cima

Nos encontramos en septiembre de 1889. La Exposición Universal de París es un éxito rotundo, y Gustave Eiffel se encuentra en la cúspide de su carrera, tanto en sentido literal como figurado. Su Torre es la estrella de la Exposición y varios miles de visitantes hacen cola cada día para vivir la emoción de subir a casi 276 metros de altura. 

Gustave Eiffel se ha reservado un despacho exclusivamente para él en el nivel superior de la plataforma de la cima de la Torre, mientras el público accede al nivel inferior. En su despacho entre las nubes, Gustave Eiffel recibe a invitados de postín. En el mes de septiembre de 1889, el inventor Thomas Edison se encontraba en París para visitar la Exposición Universal y presentar su invento: el fonógrafo, que causó una gran sensación, pues fue el primer aparato del mundo capaz de grabar y reproducir sonido. Pero Edison cruzó el Atlántico con una motivación añadida: visitar la torre más alta del mundo y conocer a su creador. 
 

Cosa que ocurrirá el 10 de septiembre de 1889. Thomas Edison no vino con las manos vacías: como gran admirador del ingeniero francés, decidió obsequiarle con el modelo más reciente de su fonógrafo, el “Class M”. Gran entusiasta del progreso tecnológico y la modernidad, Gustave Eiffel utilizará con frecuencia su regalo: se divertía grabando las voces y conversaciones con sus allegados e invitados en cada ocasión que se le presentaba. La BNF conserva varios cilindros de cera grabados por Gustave Eiffel con su fonógrafo, que son además los registros de sonido más antiguos de Francia.
 

Además de la voz de Gustave Eiffel, los cilindros incluyen las voces del filósofo y el historiador Ernest Renan, el astrónomo Jules Janssen, el escritorio Vallery-Radot y el físico Eleuthère Mascart, e incluso de los nietos y bisnietos Gustave Eiffel.

Escuche la voz de Ernest Renan, difundida por France Culture